Son las seis de la tarde del último domingo de abril. Queda una semana exacta para que sea 7 de mayo, día en el que Vicién celebrará su tradicional romería a la ermita de San Gregorio. La puerta de la Iglesia de San Miguel se encuentra medio abierta y desde el exterior se escucha a un coro cantar. Se trata de un grupo de vecinos que están ensayando los Gozos de San Gregorio. Terminado el ensayo van saliendo a la Plaza donde se despiden. Son Elena, Paco, Victor, Kico, Angelines, Jose Vicente y Antonio Capuj. Éste último lleva bajo el brazo una carpeta llena de folios, son copias de los Gozos que acaban de ensayar y en ellas se pueden apreciar a bolígrafo pequeñas notas o correcciones.
Antonio nos habla de la última vez que escuchó en la ermita cantar los Gozos de San Gregorio, además claro está de hace justamente un año cuando él mismo subió al altar y los cantó a capela. Fue hace unos 60 años cuando tenía alrededor de 12 años de edad. Recuerda perfectamente como una vez terminada la misa en la ermita Jesús de Moles y otros vecinos cantaban los Gozos siendo arropados por el resto de asistentes que cantaban al unísono «la voz del pueblo», el estribillo. Una vez habían terminado, todos salían al exterior y entonces se procedía a realizar la bendición de los términos.
Aquella imagen y la melodía de los cantos se le quedaron a Antonio grabados en su memoria para siempre. Lamentablemente, como bien nos recuerda, no disponemos de ningún video en el que poder ver y escuchar esta parte de nuestro patrimonio inmaterial que se perdió en los inicios de los años sesenta. La idea es que esto cambie y de hecho ya lo está haciendo, vivimos otros tiempos más tecnológicos, los audios de los ensayos son grabados con los teléfonos móviles y enviados por WhatsApp entre los componentes del coro, para así poder escucharlos ya en casa. Y cambiará el próximo domingo cuando la tecnología deje constancia para las generaciones venideras ya no de la letra si no de como se cantaban los Gozos a San Gregorio en el día grande de sus fiestas patronales.
Antonio nos cuenta como en los inicios de los 90 la letra de los Gozos fue encontrada en unos viejos libros de la Iglesia. Después, en el año 98 siendo él concejal de fiestas del Ayuntamiento, fueron publicados en el programa de fiestas de aquel año. Un primer hito para su recuperación que culminará el próximo domingo cuando el nuevo coro los vuelva a cantar en la ermita. Después quién sabe, se seguirán cantando o no, pero las futuras generaciones ya tendrán constancia de que existieron, de su letra y de cuándo y cómo se cantaban.
